Haciendo honor a su nombre, Retreat Home es una casa de retiro para escapar del frenético ajetreo de la vida urbana.
Casa de vacaciones de un comerciante de diamantes de Surat, esta casa elemental pero contemporánea se ha diseñado para acoger a familias extensas, dando cabida a cálidas interacciones, ya que conecta a la perfección el interior con el exterior.
La idea era concebir un espacio donde la extravagancia rústica se entrelazara con el confort, donde cada detalle estuviera meticulosamente elaborado para crear recuerdos duraderos.
En su primera aparición, la morada se revela como una estructura lineal de dos niveles parcialmente camuflada entre los verdes. La casa se asienta sobre un pintoresco tejado a dos aguas, con vistas a una abundante vegetación que espera expresar su narrativa.
La entrada se realiza a través de un pasillo lineal que se abre a un gran vestíbulo que, a su vez, se abre a las vistas del patio.
La casa utiliza mampostería de piedra Rajula para la elevación de la planta baja, con el fin de crear una base visualmente más sólida. Sus tonos terrosos y texturas contribuyen a crear una sensación de conexión con la naturaleza, al tiempo que añaden una dimensión sensorial a la arquitectura.
La primera planta alberga principalmente dormitorios y zonas informales, todos ellos dedicados al espacio personal de la familia. El alzado presenta ladrillo visto en todas las paredes exteriores, lo que le confiere profundidad y carácter. Las paredes huecas dejan espacio para las ventanas de gran profundidad que funcionan como un dispositivo de sombreado sin fisuras. Entre las dos plantas hay una banda de hormigón visto que añade una capa de interés visual que influye en la escala percibida. La estructura de acero del tejado, con tejas Mangalore encima, completa la composición. La parte inferior del tejado se ha revestido con paneles de madera contrachapada para dar calidez a los interiores y contrastar con las pálidas paredes enlucidas de cal de los interiores. El suelo está revestido con piedra kota colocada en diversos patrones en distintas zonas para simular una definición del espacio. El salón tiene un patrón de terrazo hecho con tiras de piedra kota que le dan un aspecto de alfombra. Los interiores tienen una paleta apagada de madera de teca y roble blanco, paredes enlucidas de cal, suelos de kota con un toque de latón, todo ello creando un éter cohesivo.
Las amplias habitaciones con mobiliario minimalista ofrecen a los residentes la poética libertad de disfrutar de una humilde sencillez rústica sin renunciar a las comodidades modernas.
Todos los umbrales se han diseñado meticulosamente para que se pueda disfrutar de ellos con cualquier tiempo. Los enrejados de madera de la otta de la sala de estar y la sala de deportes protegen del sol del suroeste y ofrecen una sociografía variada a lo largo del día, con un columpio indio por excelencia como protagonista.
El paisaje se ha diseñado conscientemente con especies como el gulmohar, el neem, el baniano, el cocotero y la tabebuia rosea, que conectan con el contexto tropical y se hacen eco de nuestras raíces. La zona abierta está salpicada de caminos de piedra agra roja, cortados irregularmente y esparcidos sobre la hierba.
El diseño general y la paleta de materiales tienen una eminencia intemporal que puede resistir los cambios de las tendencias arquitectónicas, mejorando a menudo su aspecto con el paso del tiempo a medida que envejece con gracia y gana carácter.