Nubank es una empresa de tecnología financiera que ofrece servicios a través de una plataforma digital. A lo largo del proceso de desarrollo del diseño, nos enfrentamos al reto de establecer un hilo coherente que conectara la narrativa espacial con el propósito y la misión de la empresa. Como fintech, Nubank se centra en ofrecer una experiencia bancaria más accesible, transparente y eficiente a las personas, especialmente a aquellas que se han enfrentado a las barreras tradicionales del sistema bancario. A lo largo del proyecto, nos propusimos desafiar y romper posibles estereotipos asociados a la banca tradicional y anticuada.
Si bien Nubank es una empresa digital que opera bajo un modelo híbrido, los Nubanker necesitaban contar con un espacio inspirador que fomentara las conexiones humanas y les permitiera seguir innovando de manera eficiente. Además de crear un espacio que celebra la tradición cultural de México, este espacio encarna todo lo que forma parte del universo Nubank. Así, el espacio refleja inclusividad, disrupción, creatividad e innovación en línea con los valores y la cultura de la organización.
El concepto de diseño se basa en la creación de una red social que actúe como un marco sólido, capaz de soportar y abrazar la modernidad líquida en la que nos encontramos inmersos hoy en día. Esta red no sólo simboliza la interconexión entre individuos, sino también la intersección entre la velocidad de la vida moderna y la necesidad de un sistema de apoyo sólido que proporcione estabilidad y seguridad. En este contexto, la red social diseñada se convierte en un vínculo entre el ritmo acelerado de la era actual y la búsqueda de conexiones significativas, ofreciendo una plataforma que aborda la urgencia de la inmediatez sin sacrificar la importancia de las relaciones humanas y la confianza.
En la producción y realización de este espacio se hizo hincapié en traducir la narrativa conceptual en elementos tangibles que encarnaran la transparencia y la flexibilidad. El reto consistía en integrar a la perfección elementos artesanales, como la celosía artesanal en las salas de reuniones, con la tecnología moderna. La ausencia de espacios asignados fomenta un entorno de trabajo dinámico, en consonancia con las características de la modernidad líquida.
El cuidadoso equilibrio alcanzado entre la artesanía tradicional y la tecnología de vanguardia no sólo realza el atractivo estético, sino que también refleja el compromiso de crear un espacio de trabajo cohesionado, adaptable y tecnológicamente avanzado, en sintonía con las exigencias de la dinámica de trabajo contemporánea.
Los acabados desempeñaron un papel crucial en el proyecto al combinarse de forma complementaria, incluyendo textiles, tejidos, alfombras, vidrio, murales y mobiliario. Este enfoque resaltaba el carácter único de cada ambiente. La paleta de colores fue otra de las protagonistas del diseño, destacando el distintivo color morado NU en todas las plantas: un estallido de color que comienza en la planta baja y asciende por los niveles. Se mezcla con colores secundarios que ganan fuerza según la planta y el espacio concreto. Cada zona tiene su propia identidad y presencia distintiva.
El diseño del espacio transmite con éxito una sensación de transparencia y autonomía que se percibe en cada rincón de la oficina. La ausencia de espacios asignados permite a los usuarios utilizar distintas zonas en función de sus necesidades diarias, fomentando la flexibilidad y adaptabilidad características de la modernidad líquida. Esto es especialmente evidente en las salas de reuniones, donde una cuidada celosía artesanal sirve de metáfora visual de esta filosofía. Al tiempo que mantiene un cierto nivel de privacidad, la celosía permite la visibilidad a través de ella, simbolizando la apertura, la colaboración y la capacidad de comprender diferentes perspectivas. Este diseño no sólo optimiza el flujo de trabajo, sino que refuerza la idea de que la transparencia y el intercambio de ideas son esenciales en esta era de cambio y conectividad constantes. Aquí, donde las fronteras se difuminan, todo el mundo tiene voz para crear un entorno productivo y cohesionado.
El concepto de diseño, basado en la red social como soporte de la modernidad líquida, refleja una adaptación consciente a las exigencias cambiantes de nuestro entorno. Al mismo tiempo, reconoce la necesidad de crear un entorno en el que las personas puedan encontrar un sentido de comunidad, confianza y estabilidad en medio de la fluidez y la velocidad que caracterizan nuestro tiempo. La red social diseñada no sólo conecta a los individuos, sino que también se convierte en un refugio, un lugar donde la gente puede encontrar apoyo mutuo, colaboración y la sensación de pertenecer a algo más grande, a pesar de las incertidumbres que trae consigo la modernidad líquida.
En este sentido, el diseño de esta red social se erige como una respuesta creativa a las tensiones y paradojas de la era contemporánea, proporcionando un espacio de encuentro que equilibra la necesidad de adaptación constante con la búsqueda de relaciones genuinas y significativas.
Uno de los retos del proyecto era conseguir que cada habitación, cada pasillo y cada rincón, en general, formaran parte de la narrativa conceptual y fueran únicos, creando una sensación de sorpresa al moverse por el espacio.